domingo, 17 de junio de 2012

Historia de Emutsa (Mieres)

La primera de las empresas a las que rendimos homenaje en esta web no es otra más que Emutsa, la cual gestiona el transporte urbano en el concejo de Mieres desde hace más de 50 años. Quién esto escribe ha de reconocer cierta simpatía hacia esta empresa, desde niño siempre se sintió atraido por el mundo del autobús y en el concejo de Mieres, si se podía presumir de algo, era de tener una muy diversa variedad de autobuses y unos grandes y amables profesionales.

Inauguración de la empresa
Vamos a repasar un poco la historia su historia, si hoy en día existen dificultades de comunicación con Mieres por algunas infraestructuras de los pueblos del concejo, imaginen lo que tenía que ser hace 50 años. La empresa municipal de transportes de Mieres nace en el año 1956 aunque ya se estaba gestando tiempo atrás, concretamente hay que remontarse al 6 de diciembre de 1935, cuando surge la idea de la municipalización de un servicio de transportes de viajeros hacia Turón. Al año siguiente se designó una comisión especial para redactar la memoria del proyecto y en los años posteriores se fueron incluyendo recorridos posibles a otras localidades del municipio. En 1940, el Sr. Sánchez Del Río presentó la memoria descriptiva en la que se detallaban las líneas, tarifas y reglamentos que regirían el futuro servicio municipal siendo aprobado por el pleno y entregado al ministerio de obras públicas para su aprobación. Muchos años tendrían que pasar de gestiones, cambios e inclusiones de nuevos puntos, hasta que el 9 de diciembre de 1949 se aprueba el reglamento de ordenación de transportes mecánicos por carretera, así el ayuntamiento de Mieres presenta la solicitud al ministerio de obras públicas para que señale los límites municipales.

Primera flota de Emutsa
Partiendo de la base desarrollada en los años 40 y realizando una serie de ajustes, se comienza a estructurar de poco en poco las líneas empezando por las más básicas y aumentándolas conforme se produzcan resultados. De esta forma, tras las recomendaciones del ingeniero de caminos, se fijaron 3 líneas primigenias: de Mieres a Turón con finalización en Urbies, de Mieres a Valdefarrucos pasando por Figaredo y Ujo y de Mieres a la Carba y el Caño. En cuanto a la conformación de la empresa, el proyecto original de 1940 contemplaba nueve vehículos (siete funcionando en servicio y el resto como reserva), pero se propuso reducir el número de autobuses a seis incluyendo uno pequeño que serviría como auxiliar de los restantes quedando un total de siete coches. De igual forma se proponía crear una cochera con taller y servicios de lavado y engrase y también la contratación de 23 personas que desempeñarían diferentes puestos en la empresa. Este nuevo proyecto fue la base definitiva del ayuntamiento para crear el servicio municipal de transportes.

Las clásicas cobradoras
Es el 24 de marzo de 1953 cuando se declara “casco urbano” a todo el concejo y se establece la exclusividad del consistorio como regulador y explotador del transporte urbano. El 28 de diciembre de 1955, se firma por fin el acta de constitución del servicio municipal de transportes como empresa mixta, aunque se cambió finalmente a empresa municipal de tal forma que el 22 de diciembre de 1956 se aprueban los estatutos que formaban una empresa privada municipal. Si se dan cuenta, han tenido que pasar muchos años desde la idea de desarrollar este servicio hasta su puesta en marcha definitiva. (Probablemente los retrasos y dificultades se deban en gran medida a la guerra civil y los años de postguerra)
Pero vamos al meollo del asunto, la empresa municipal se estrena oficialmente el 1 de mayo de 1956, comenzarían explotándose las líneas que más rentabilidad ofrecerían al ayuntamiento para después, con las ganancias de estas, generar nuevos trayectos que no fueran tan rentables. La flota inicial de autobuses constaba de 10 vehículos, la empresa por su parte daba empleo a 39 personas (13 conductores, 21 cobradoras, 4 mozos de equipaje y 1 lavador), las líneas que se pusieron a funcionar fueron la de San Andrés – Urbies; Ujo – Valdefarrucos; Cenera y La Carba. Al año siguiente, en 1957, se establece la nueva línea a Entrerrios y La Caleya. Diez años después se crea la línea a Baiña y también los servicios a Padrún. En aquellos años 60 la empresa tenía 10 líneas funcionando: L1 San Andrés y Urbies, L2 Cenera, L3 Valdefarrucos, L4 Entrerrios, L5 La Caleya, L6 Fábrica, L7 Polio, L8 Baiña, L9 Senrriella L10 Padrún.
 
Antiguas cocheras municipales, detrás del colegio Liceo
Por supuesto los recorridos fueron aumentando y se incorporaron más, en noviembre de 1975 se realiza trayecto por San Nicolás y se establece la nueva línea entre Mieres y Ablaña. En el año 1982 se instauran los servicios a Carcarosa y  Paxio. Por supuesto todo el mundo recuerda también los servicios de empresa para trabajadores de HUNOSA, los servicios escolares o el transporte del personal sanitario. La empresa llegó a tener 110 trabajadores en activo durante su máximo esplendor en los años 60 y 70, que es cuando creció la demanda poblacional. 110 son muchos, había todo tipo de puestos de trabajo; a los más recordados como las cobradoras o los evidentemente necesarios mecánicos, ajustadores, gerentes, conductores, limpiadores y guardas de seguridad, hay que destacar un papel muy curioso que duró hasta mediados de los 80 y que era el de mozo de equipaje. Habrá quien recuerde esta figura,  (por aquel entonces un servidor era un niño) que se encargaba de ordenar, organizar y cargar los bultos que la gente transportaba en el autobús sean maletas, bolsas o jaulas con animales de granja (un clásico de las películas de Martínez Soria jejeje).
 
Mozo de equipaje
¿Recuerdan a las cobradoras?, seguro que sí. Ellas se encargaban de organizar la subida y bajada de gente en el autobús y de entregar los billetes a los viajeros, siendo ellas también quienes solicitaban parada al conductor de varias maneras distintas, por ejemplo: si realizaban un toque de timbre, significaba que el conductor debería parar en la siguiente parada para que bajase un viajero; si tocaba el timbre dos veces sería indicación de que el conductor debe reanudar la marcha; pero si eran tres veces las que sonaba el timbre, significaba que el autobús estaba lleno y no podía cargar más gente. Al igual que el mozo de equipaje, las cobradoras desaparecieron en los 80 quedando algunas de ellas desempeñando otras labores en la empresa como por ejemplo conductoras, ya que muchas se sacaron el carnet.
 
El número 6, un Pegaso 5081 que prestó servicio desde 1980 hasta 2004
Decía que en 1956 la empresa tenía 10 autobuses, pues bien, 20 años después la empresa disponía de 24 vehículos. Quién esto escribe recuerda con mucho cariño varios de estos autobuses porque pese a no haber nacido en aquella época, prestaron servicio durante muchos años. Recuerda con mucho cariño aquel Pegaso 5062, que prestó servicio desde el año 1977 hasta 1995 (era el número 5) o aquel Pegaso modelo 5081, que tenía como número el 6 y que estuvo funcionando desde el año 1980 hasta el año 2004 (un clásico de Carcarosa o Urbies).
 
El número 7, un Pegaso 6035.
También recordarán por supuesto a los colosos de la empresa, los autobuses más grandes y recordados como el Pegaso modelo 6035, del que tenían unos cuantos y que fue reconvertido como área de descanso en el actual centro de transportes de Mieres. Por supuesto, aunque me dejo muchos otros en el tintero, hay que mencionar también al fenomenal minibús “mundialito”, el número 30, que era un Pegaso 5702 y que hoy día puede verse en todas las ferias de Asturias restaurado una y otra vez por FUCOMI, ni tampoco al robusto Pegaso 5024, que estuvo desde el año 1982 hasta el año 2004 funcionando como un campeón. Aunque no lo crean, las máquinas expendedoras de billetes llegaron en año 1988, eran aquellas de color naranja que fueron sustituidas posteriormente por ese lector de tarjetas que duró muy poco tiempo y que fue reemplazado enseguida por las actuales máquinas del consorcio de transportes de Asturias.
 
Los tranvías, un proyecto fallido
Emutsa intentó experimentar con otro tipo de servicio en los años 60, aquel experimento no tuvo éxito y duró poco más de 3 años dejando a la empresa con ciertos problemas financieros, me estoy refiriendo a los famosos trolebuses y la electrificación de la línea 1 a San Andrés. Aquello se hizo con la intención de ahorrar en combustible ya que los costes de este resultaban muy elevados en la época dada su escasez en los mercados. Toda la línea discurría con un doble tendido de cobre que tenía dos subestaciones eléctricas, una en San Andrés y otra en las cocheras en Mieres. Había tres trolebuses Pegaso numerados del 101 al 103, luego se compraron 4 más a Madrid cuando su vida útil en la capital española había terminado. El primer trolebús comenzó a circular en el año 1965, justo en el día en que Mieres celebraba la festividad de San Xuan, el 24 de Junio. Se realizó una retransmisión multitudinaria a través de Radio Nacional de España. Este proyecto que ya se estaba gestando desde el año 1957, no llegó a su término hasta el citado año 65, lo que provocó una serie de incrementos en la inversión que, aderezada con la defectuosa alimentación eléctrica de la línea y los continuos robos de cable de cobre, hicieron que el 21 de octubre de 1968 se desmontara toda la línea regresando únicamente al servicio de autobuses.
 

En un primer momento, y como curiosidad, les diré que la empresa llevaba por nombre EMAMSA (Empresa municipal de autobuses de Mieres sociedad anónima). Así se llamó hasta el año 1965, concretamente hasta el día 22 de junio, dos días antes del estreno del trolebús. Es obvio que el cambio de nombre coincidía con las intencionesde explotar los trolebuses en el concejo además de los autobuses, así nace EMUTSA (Empresa municipal de transportes sociedad anónima). La empresa se ubicaba en un primer momento en el propio ayuntamiento, trasladándose posteriormente a la plaza del Generalísimo (actual Plaza de la Constitución). Después se desplazaron a los bajos del edificio 22 de la calle Ave Maria (actual Alas Clarín), donde también servía de cabeceras y fin de trayecto de las líneas. Sucede que esta zona se convirtió en importantes zonas educativas del concejo siendo ampliaciones de los colegios Aniceto Sela y Liceo Mierense, así que hubo que trasladarse de allí temporalmente a la antigua Avenida José Antonio (actual Manuel Llaneza). Luego, en 1971, la empresa encomienda la construcción de un edificio de dos plantas para oficinas en La Belonga, un lugar donde se encontraban las cocheras de la empresa desde el año 1965. Las nuevas oficinas se estrenaron en el año 1973 y se mantuvieron allí hasta no hace muchos años cuando se creó el actual centro de transportes de Mieres.
 
Vista aerea del centro de transportes
En él, no solamente se encuentran las oficinas, cocheras y talleres de EMUTSA sino que también se sitúan varios talleres de aprendizaje y aulas formativas para diferentes especialidades que van desde mecánica de vehículos a conducción de los mismos. También allí se ofertan plazas para guardar camiones, caravanas y demás transportes bajo la gestión de la empresa. Actualmente, EMUTSA oferta una total de 10 líneas regulares que son las siguientes, L1: Mieres – San Andrés – Urbies; L2: Mieres– Cenera; L3: Mieres – Ujo – Valdefarrucos; L4: Mieres – La Rebollada– Padrún; L5: Mieres – Ablaña – S. Nicolás y Santa Eulalia (llega hasta Morcín); L6: Mieres – Carcarosa; L7: Mieres – Paxio; L8: Nuevo Santullano – Mieres – Entrerrios – PolioL9: Mieres – Santo Emiliano y L14: Mieres – Hospital. A estos servicios hay que unir los escolares y los servicios nocturnos “Curuxa”, que se hacen únicamente en las noches festivas del concejo. Sin temor a equivocarme, actualmente existen en funcionamiento activo 14 autobuses que van numerados desde el 45 al 59. Desde luego que se quedan muchas cosas en el tintero, poco a poco iremos actualizando esta publicación con nuevos datos sobre la historía de esta clásica empresa, sigan atentos.
 
El vehículo más moderno de la empresa, adquirido en 2010, un Scania Irizar i4 LE, es el número 59
Agradecimientos: Agradecer a la empresa municipal de transportes EMUTSA, por ceder las imágenes que acompañan este artículo, su uso es exclusivamente ilustrativo sin fines lucrativos y todos los derechos de las mismas pertenecen a sus correspondientes autores quedando expresamente prohibida su distribución sin el pertinente permiso previo. También agradecer a los conductores y trabajadores de la misma, especialmente a Arantxa. De la misma manera, agradecer igualmente a quienes han elaborado la publicación especial “50 años de Emutsa”, toda la información aquí recogida se encuentra elaborada en dicho libro y con imágenes de mayor calidad.